El término “helper at the nest” (colaboradores del nido) es una palabra que se utiliza en etología y biología evolutiva para describir una estructura social en la que jóvenes sexualmente maduros ayudan a llevar adelante nuevas generaciones, en lugar de intentar reproducir se ellos mismos. Este fenómeno fue estudiado por primera vez en pájaros, pero también conocido en mamíferos e insectos.
Este concepto lo leí por primera vez en el libro La cadera de Eva de José Enrique Campillo Álvarez. En el libro hace referencia en el capítulo “tías solteronas” (concepto que personalmente no me gusta):
“Imaginemos, por ejemplo, hace cien mil años, en plena glaciación, a una hembra preñada que, además de estar amamantando aún a una cría, debía cuidar a otra de tres años: apenas podría abandonar las proximidades del refugio donde habitaba el clan. En estas circunstancias la colaboración de las tías resultaba esencial.”
Este contexto ayuda a incorporar a nuestro imaginario cómo se vivía la maternidad en las cavernas y cuán importante era la red.
A partir de esta curiosidad, he buscado si la evidencia científica hacía referencia a ello. Existen pocos estudios y concluyen que la presencia de «potenciales ayudantes» en el hogar se asocia significativamente con una mayor supervivencia de las crías.
En nuestros inicios, la crianza necesitaba una red de soporte para poder desarrollarla. El concepto de comunidad y cooperación era básico para asegurar su descendencia. Ésta es nuestra historia, la realidad por la que nos ha esculpido la evolución.
La realidad actual es muy distinta. Ahora pasamos los meses de posparto en solitario y se vive como una carga exclusivamente materna. La ayuda que puede aportar la comunidad puede ser un hecho determinante para transitar el posparto con la felicidad y el amor que aporta un bebé. Sentir el acompañamiento de otras madres que ya han pasado las dificultades o notar la seguridad de poder dejar a la criatura con otra persona para descansar, airearse, relacionarse… puede ser un éxtasis de felicidad.
Entonces, te animo a buscar a las colaboradoras del nido, es decir, aquellas personas que te transmiten la seguridad y tranquilidad para sostenerte y ayudarte durante el postparto.